La Torre de David

Torre de David. Imagen de Wikipedia.

La Torre de David es una de las imágenes icónicas de Jerusalén. Está ubicada dentro de los muros de la Ciudad Antigua, en el Barrio Armenio. A pesar de su nombre, no tiene absolutamente nada que ver con el Rey David. Fue construida por el Rey Herodes, una de tres torres de vigilancia en la esquina de su palacio. Entre el Rey David (Siglo X A.C.) y el Rey Herodes (Siglo I A.C.) hay casi mil años de diferencia. ¿Por qué entonces la llamamos Torre de David? Cuando los cruzados llegaron a Jerusalén en el Siglo XI vieron una gran torre a la entrada a Jerusalén y así razonaron: Jerusalén es la Ciudad del gran Rey David, una torre tan imponente tiene que ser la Torre de David. No sabían que Jerusalén en tiempos de David estaba uno cientos de metros hacia el este (donde hoy se encuentra el Parque Ciudad de David). Los cruzados llegaron a Jerusalén impulsados por un gran fervor religioso, iban identificando sobre el terreno los sitios nombrados en las escrituras, no siempre con gran acierto.

La Torre de David es mecionada en el Cantar de los Cantares, en el Antiguo Testamento. En la tradición judía, el Cantar de los Cantares suele ser interpretado como una alegoría del amor entre Dios y el Pueblo de Israel. A un nivel no tan espiritual, se puede leer como poesía erótica entre dos amantes: el Rey Salomón y la Reina de Saba. Entre otras alabanzas a la hermosura de la Reina de Saba, el Rey Salomon le dice: "tu cuello es como la Torre de David" (Cantares 4:4). Un piropo un tanto extraño, si se mira bien a lo que hoy llamamos Torre de David que es bastante ancha. Imagino que el Cantar de los Cantares se refiería a otra torre más fina y esbelta que ya no existe, a menos que la reina fuera muy gorda y así le gustaran las mujeres a Salomón. De todos modos, en Jerusalén la tradición es más fuerte que la Historia. Aunque hoy nadie duda de que la torre es de los tiempos de Herodes, igual le seguimos llamando Torre de David. Incluso el museo de historia que allí se aloja, se llama Museo de la Torre de David.

El Palacio del Rey Herodes era enorme, ocupaba todo el actual Barrio Armenio. Algunos investigadores especulan que podría ser el Pretorio, sitio nombrdo en los evangelios, donde Poncio Pilato juzgó a Jesús. Aunque según la teoría más conocida, respaldada por la tradición, el Pretorio era otro edificio en otra parte de la ciudad: la Fortaleza Antonia, en el actual Barrio Musulmán. Cuando los romanos tomaron Jerusalén en el año 70 A.D. destruyeron las tres grandes edificaciones de Herodes: el Templo de Jerusalén, el Palacio y la Antonia. Dejaron la Torre de David en pie, tal vez para que quien la viera pudiera hacerse una idea de cuán grandes y espléndidos habían sido esos edificios, cuán terrible fue la destrucción. Para que sirviera de lección y nadie osara volver a revelarse contra los romanos.

Le llamamos también Ciudadela de David (no confundir con el Parque Ciudad de David que es otro sitio). Una ciudadela es una fortificación adicional en la ciudad. Si el enemigo consigue penetrar en los muros, todavía queda otro bastión amurallado donde refugiarse. La Torre de David, reparada y ampliada, cumplió esa función durante siglos. Cuando los cruzados conquistaron Jerusalén en el 1099, masacraron a toda la población de la ciudad sin distinción: judíos, cristianos, y musulmanes. La crónicas cruzadas, algo exageradas, dicen que la sangre llegaba hasta las rodillas de los caballos. Las autoridades de la ciudad se refugiaron en la Torre de David, negociaron su rendición y salieron con vida.

0 comentarios:

Publicar un comentario